ORO VEGETAL©Ángela Ibáñez
USED (CAMPOS DE ZAIDA)
El campo con su faz dormida
me mira, quieto.
El viento le acaricia quedo
Su pelo de mies dorada.
La luz que baña su frente
difumina sus ojos en el horizonte.
Una reminiscencia de claro oscuro
terroso lo invade todo.
Es un cuadro que algún día pintaré
en el tapiz de mis recuerdos,
habrá notas oscuras, grises,
fruto del paso de los años.
Mas ahora sólo
es un niño dormido en mis ojos
y hasta que los cierre
lo seguiré viendo así,
pequeño,
hermoso…
El campo con su faz dormida
me mira, quieto.
El viento le acaricia quedo
Su pelo de mies dorada.
La luz que baña su frente
difumina sus ojos en el horizonte.
Una reminiscencia de claro oscuro
terroso lo invade todo.
Es un cuadro que algún día pintaré
en el tapiz de mis recuerdos,
habrá notas oscuras, grises,
fruto del paso de los años.
Mas ahora sólo
es un niño dormido en mis ojos
y hasta que los cierre
lo seguiré viendo así,
pequeño,
hermoso…
Poema de Ángela Ibáñez
del libro Veinte Poetisas.
Ed. Torremozas. Madrid 1984.
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